No sé si sois conscientes, pero la metáfora, además de impregnar nuestro lenguaje, también impregna nuestro pensamiento y nuestra acción. Recuerdo que, durante mi época de instituto, solamente estudiábamos la metáfora en poesía, pero no nos hacían conscientes de que la metáfora se encontraba en nuestro día a día, por ejemplo, en expresiones como “perder la cabeza”, “tener el ánimo por los suelos” o el famoso “¿Cómo están los máquinas?” de David Bisbal. Ese, por tanto, se convierte en mi objetivo: hacerle ver al alumnado de Secundaria que el lenguaje cotidiano tiene una naturaleza metafórica.
Título: La metáfora de la vida cotidiana como recurso didáctico en 4.º de ESO
Resumen: La metáfora impregna el lenguaje, el pensamiento y la acción; en resumen, impregna nuestra vida cotidiana. Según la teoría cognitiva de la metáfora, el ser humano piensa y actúa en términos metafóricos, lo que le permite construir, reorganizar y determinar la realidad. En el ámbito educativo, las metáforas ayudan a comprender conceptos complejos o desconocidos, consiguiendo así una mayor comprensión de la realidad y favoreciendo la competencia comunicativa del estudiante. Asimismo, la imagen cumple un papel fundamental en la comprensión e interpretación de la metáfora al descifrar los sentidos literales y figurados de las expresiones. Con todo ello, la metáfora se convierte en un vehículo educativo que permite al alumno acercarse a la lectura y a la literatura, y, por extensión, a la realidad reflexiva y crítica.
Palabras clave: metáfora, cognición, imagen, didáctica de la lengua y la literatura, conciencia metafórica
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